dissabte, 17 de setembre del 2016

Niños robados

Niños robados

La vida no deja de sorprenderme a veces de forma desagradable. 

Es a veces cuando te reúnes en grupo que hablando de cosas banales,  salen conversaciones que tienen miga.

Fue el otro día en hablando con otras dos amigas, yo soy un poco la agregada ellas lo son desde la época de colegio. 

Hablábamos  y según transcurría la conversación salió el tema hijos. Me dice, tú conoces a mis hijos ¡ no!  y le contesto claro a una más que la otra, pero si les conozco. Entonces me dice es que tengo tres, y he aquí mi asombro y mi extrañeza, me cuenta que siendo muy joven tuvo un hijo que al mes de nacer le dieron  por muerto, sin que nadie llegara a ver el pequeño cuerpo.

Como más me relataba mas asombrada estaba, no salía de mi asombro. Es de estas cosas que oyes por los medios y te dejan K O, pero oyendo contarlo en primera persona,  de tú a tú es impactante, desde que lo he sabido ni cabeza no para de dar vueltas al triste suceso.

Es un poco más joven que yo, pero presiento que su interior es un caos, se ríe, si pero su mirada está lejos, sus ojos tristes, aparte de esto la vida tampoco se lo ha puesto fácil.  La vida nunca te lo pone fácil, pero siempre toca a los mismos.

Creo que son muchas las veces que aprendes a  base de los golpes, estos golpes a traición  que la vida te da, cuando más fuerte te golpea  mas vacunado estas,  llegando al momento que estas inmunizado para todo malo  que puede venir. Eres como un “Punching ball” en un cuadrilátero de boxeo.

De que sirven las investigaciones si luego no sacan los resultados a la luz, poco les importan los sentimientos de las madres . Entre ellos se tapan unos a otros, la Iglesia la parte más  hipócrita  que existe en nuestra sociedad. La clase médica el corporativismo que gastan es alucinante, después de hacer las pruebas  y exhumar el pequeño cuerpo se les niega el derecho a saber. 

Ahora por medio de una asociación o plataforma que han creado se volverán abrir los casos no sé si sacaran algo en claro aunque la esperanza es lo único que se pierde, personalmente me gustaría que la investigación diera sus frutos. 

Las madres buscan sus hijos y respuestas, pero es que también hay hijos que buscan sus verdaderos orígenes e indagan y de esto hay pruebas, a mi amiga hace unos meses le llamo un chico que le pregunto si podía ser el su hijo, pero por la edad no era posible. 

Así habrá infinidad de casos de frustraciones  y de esperanzas  rotas,  lagrimas, muchas lagrimas vertidas con desesperación al ver la impotencia que te queda, de ver la indiferencia  con que tratan a las madres,  va por encima de la ética de la razón y la moral, ¿saben acaso que es esto?.

 Nada me gustaría mas que al fin pudiera dar carpetazo a esta parte desagradable de su vida, que al fin pudiera dormir  con la tranquilidad de saber la verdad y no estar con esta incertidumbre, esto es un sin vivir.

,